La Compañía de Jesús refuerza con un programa de formación la protección de poblaciones vulnerables y la prevención de violencia en sus obras
04/09/2024La Compañía de Jesús en Bolivia refuerza la protección de los niños, niñas, adolescentes y adultos en situación de vulnerabilidad y la prevención de toda forma de violencia en sus obras con un programa de formación dirigido a los colaboradores de la orden religiosa (jesuitas y laicos).
El programa se desarrolla desde julio pasado con 130 participantes, de una veintena de obras, distribuidas en los departamentos de La Paz, Santa Cruz, Cochabamba, Chuquisaca y Beni.
La Compañía ha enfatizado la necesidad de no ser indiferentes ni indolentes ante cualquier tipo de violencia y de que todos los colaboradores se formen en la cultura del cuidado y la prevención para que nadie sufra abusos en las obras a su cargo.
“La Compañía de Jesús quiere subrayar una vez más su política de tolerancia cero ante los abusos como varias veces ha reclamado al respecto el propio papa Francisco”, dijo el provincial jesuita, Bernardo Mercado S.J., en la inauguración del programa formativo en julio pasado.
El curso contiene diez módulos, entre ellos: Sensibilización para la prevención de la violencia y abuso sexual; Educación integral de la sexualidad; Cultura del cuidado y prevención de la violencia bajo las normativas y procedimientos del Defensoría de la Niñez y Adolescencia (DNA) y los Servicios Legales Integrales Municipales (SLIM).
Además, se desarrollaron ya talleres sobre el Código Penal y el Código de Procedimiento Penal en lo referido a violencia sexual; y en Escucha activa y la resolución de conflictos, claves para un entorno seguro y resiliente.
La Delegada de la Compañía en Bolivia del Centro de Prevención de Ambientes Sanos y Seguros, la psicóloga Sandra Carvajal, dijo que el programa fue diseñado con la firme convicción de que, en un mundo donde la violencia puede surgir en cualquier lugar, es vital que la Compañía de Jesús y sus colaboradores “estén unidos con una misión en común”.
“Es imperativo que construyamos un entorno seguro y justo, en el que cada voz sea escuchada y cada acción cuente. Solo así, trabajando juntos, podremos avanzar hacia un futuro sin violencia, donde cada individuo pueda experimentar la plena inclusión y el respeto que merece”, explicó Carvajal.
De su parte, el padre Sergio Montes S.J., consultor de la Provincia y coordinador del comité de crisis, subrayó que la orden trabajará en la cultura de prevención de forma amplia hasta que resulte “de sentido común el modo en que podemos pensar, sentir y actuar” para dar protección a los demás.
El programa de formación, según destacó, es parte de un proceso iniciado desde hace varios años, que ha dado como fruto políticas de prevención en las obras y que ahora se expresará en la formación del personal para sensibilizarnos en la importancia de la protección para erradicar cualquier posibilidad de violencia en las obras educativas, apostólicas y parroquiales, sociales, espirituales, de la comunidad y en los medios de comunicación de la orden.
La Compañía de Jesús afronta denuncias de abusos cometidos en décadas atrás, que son tratadas en la Justicia, pero también, en una línea de compromiso contra la violencia, ha actualizado sus protocolos de prevención, actuación y denuncia para aumentar el cuidado y proteger a las poblaciones vulnerables.
En el acto de inauguración del programa y desde Chile, el Coordinador general de Ambientes Sanos y Seguros de América Latina de la Compañía de Jesús, Larry Yévenes S.J., destacó que el trabajo de la provincia de Bolivia es “el primer peldaño” de una capacitación más amplia en la cultura del cuidado que las provincias jesuíticas celebrarán en el mundo durante tres años, entre el 2025 y 2027.
Recordó que, en 2019, el padre general, Arturo Sosa S.J., se comprometió a que la Compañía trabajaría para “eliminar todo tipo de abuso, tanto dentro como fuera de la Iglesia, buscando asegurar, primero la escucha apropiada y la atención a las víctimas”, y también enfatizó su compromiso para “hacer justicia”, “reparar los daños causados” y trabajar para la capacitación permanente en la prevención.
El programa en Bolivia incluye a destacados investigadores en el rol de educadores como la especialista en educación sexual, Marynés Salazar; el psicólogo experto en DNA y SLIM y en la normativa penal relacionada con los abusos, Esteban Huallapara; los abogados penalistas Alan Sillerico y Jessica Echeverria, y la neuropsicóloga Indira Flores, entre otros profesionales destacados que imparten los talleres de formación en diez módulos.